Viaje al cuarto de una madre (Celia Rico, España, 2018)
Ópera prima de Celia Rico ganadora del Premio de la juventud en San Sebastián con Anna Castillo y Lola Dueñas como hija y madre respectivamente. Distribuye Bteam Pictures.
Cuando esperas tanto de una película española, una ópera prima, el viaje que esperas hacer ante la pantalla lleva consiguo ilusión, esperanza y también análisis crítico lo más objetivo posible. Si viene encima auspiciada por las críticas en San Sebastián y con un premio otorgado por chavales de entre 18 y 25 años; si encima está dirigido por una directora novel y protagonizado por Lola Dueñas y Anna Castillo, lo que menos esperas es una película insulsa.
Una ópera prima que no destaca por una historia insistentemente trillada, las relaciones materno filiales, por unos dialogos que parecen salidos de otro siglo ni por una ambientación y unas formas más propias de nuestros padres y abuelos que de nosotros y nuestros hijos. El mundo de la tecnología que está explorado en la película con pinzas y sin indagar en ningún momento, se contempla no desde la distancia sino desde la completa desidia, el quiero y no puedo
Una madre y una hija, dos mujeres en un lugar por el que parece que no ha pasado el tiempo. Su casa alberga el dolor, la pérdida, la muerte y la soledad. Una atmósfera silente y desocupada.
En la vida real, la madre de la directora, es costurera como lo es el personaje de Estrella interpretado en la ficción por Lola Dueñas. «Lola fue muy exigente con su entrenamiento y mi madre se volcó con ella con toda la ilusión del mundo».
En el año 2012, la cineasta presentaba su cortometraje Luisa no está en casa, protagonizado por Asunción Balaguer., donde ya estaban planteados algunos de los temas de su ópera prima, la que nos ocupa.
La película intenta, pero no consigue plantear un juego de miradas donde la comprensión, la compañía, el duelo y el continuar hacia delante son los hilos conductores.
El viaje del título es tanto un viaje espiritual como físico. El que tiene que realizar una hija para comunicarle a su madre que quiere irse a trabajar fuera y el de la propia madre hacia el camino de la comprensión y y del final del duelo, que siempre deambula toda la cinta. Recordando que ese viaje es un camino hacia el acercamiento y no hacia la separación.
Celia Rico sabe sacar lo mejor de sus actrices pero no acierta a la hora de provocar el cariño hacia sus personajes. quizás porque no consigue transformar esas vidas anodinas e historias mínimas en algo complejo o emocional.
No hay emoción por ninguna parte y por esta crítica e tan seca.
Premios: Festival de San Sebastián: Premio de la juventud
Sinopsis: Leonor (Anna Castillo) quiere marcharse de casa, pero no se atreve a decírselo a su madre. Estrella (Lola Dueñas) no quiere que se vaya, pero tampoco es capaz de retenerla a su lado. Madre e hija tendrán que afrontar esa nueva etapa de la vida en la que su mundo en común se tambalea.
Nota: 5.5