Paradise Hills (Alice Waddington, España, 2019)
Se estrena este cuento de hadas americanizado de una española que se nutre del imaginario de los relatos clásicos y los une con un dulcificado Black Mirror. La película concursó en Sundance y Sitges.
Esta fantasía distópica que emula los cuentos clásicos, pero con una estética pop punk, entre lo indie y lo barroco, parece más interesante en su propuesta que en su resultado. Sin duda, la película, es un acercamiento a cómo juzga la sociedad a las mujeres, cómo les asigna un papel y espera diletante a que los cumpla. Un cuestionamiento constante sobre la sexualidad, el aspecto físico, la salud mental, que se acrecienta cuando son aún más jóvenes y cuando la fama les acosa.
Como no podía ser de otra forma, el elenco es fundamentalmente femenino y el equipo técnico y artístico está también capitaneado por una mujer.
La estructura de cuento de hadas se va volviendo tenebrosa cuando vamos siendo partícipes de todo el engaño, a lo que contribuye una elaborada dirección artística y diseño de vestuario. Pero las temidas sospechas se hacen realidad en el tramo final en el que todo se va diluyendo, quizás no sabe como concluir o pretende ser demasiado naif, pop, etc.
Situada en un remoto islote, con un intento bastante logrado de crear una película futurística con estética nostálgica del siglo XIX, para contraponer los cambios logrados a niveles de desarrollo industrial contra los cambios sociales, que tienen que ver con el patriarcado y con los movimientos feministas. En este sentido, la película sabe iniciar la conversación, pero no plantéa demasiados interrogantes, más allá de llevar a nuestro imaginario esta problematica arrastrada de siglos, durante la duración del metraje de la misma. Es un cuento cruel de potente mirada feminista que parece más perdido en intentar encontrar sus referentes, en fusionarlos y en crear una mirada propia que aún no existe. Pero hay algo detrás. Habrá que investigar.
Es una pena porque tenía muchos ingredientes para ser una buena película, al menos es una interesante ópera prima, desaprovechada finalmente.
Premios: Sundance Film Festival: Sección Next
Sinopsis: Paradise Hills es un internado de lujo donde familias acomodadas mandan a sus hijas para que sean entrenadas y educadas para ser mujeres perfectas. Uma (Emma Roberts) es enviada allí y pronto descubrirá que la residencia oculta un oscuro secreto.
Nota: 6