El baño del diablo (Severin Fiala, Veronika Franz, Austria, 2024)

La barbarie humana, siempre infinita. En el siglo XVIII- época en la que se ambienta el últimolargometraje de Severin Fiala y Veronika Franz, “El baño del diablo”- una mujer recién casada(Anja Plaschg) martirizada y con ganas de morir por la imposibilidad de ser madre decidecometer un delito de infanticidio como salvación posible para su alma.

Tres siglos después el cine nos descubre algo que fue tan común en la sociedad centroeuropea de los siglos XVIII yXIX, máxime para las mujeres que, ante la imposibilidad de suicidarse por miedo a sercondenadas por la Iglesia, eligen cometer un asesinato como único remedio de expiación ypurificación de su espíritu pudiendo dar rienda suelta a sus frustraciones y enajenacionesmentales. Una depresión en toda regla.

Dirigida por la pareja de cineastas austriacos que ya inquietaron con sus “Buenas noches,mamá” (película que goza de una narrativa y puesta en escena al más puro estilo de sucompatriota Michael Haneke y La cabaña siniestra (no menos opresiva y turbadora que su antecesora) llegan de nuevo a España con el estreno de El baño del diablo. Una historia queles llega a través del podcast de la historiadora estadounidense Kathy Stuart; cientos deepisodios que siglos después ven la luz en la gran pantalla. “Las grabaciones llegaron anosotros por casualida y todos nos dejaron sin palabras, pero el que más nos inspiró fue elcaso de Ewa Lizlfellner – declaran los directores y guionistas- después de que un inquisidor lainterrogara tres veces”.

“El baño del diablo” es un drama rodado al más puro estilo del género de terror psicológico,que agita y desasosiega, que pone nervioso, impacta y conmueve pero no molesta. Y todosucede frente a una cámara de recorrido calmo y penetrante que muestra a unos personajesruines, oscurantistas, amedrentados por la religión y sus secuaces, con el siempre temor acuestas de la condena eterna.Una demoledora (y sanguinaría) película equilibrada y bella.

Armonía entre la estética de suforma (la hermosa fotografía de Martin Gschlacht ha sido premiada en el Festival de cine deBerlín) y la seducción de su fondo, una historia que habla de culpas, miedos y de la poderosa ycastradora influencia de la Iglesia, sin olvidar el maltrato y machismo que aún nadie sabíallamar por su nombre.

 

Festivales y premios:

Oso de Plata – Contribución artística sobresaliente (Martin Gschlacht, a Mejor Fotografía)

Película ganadora en el Festival de Sitges 2024

Película elegida para representar a Austria en los Premios Oscar del próximo año.

 

Sinopsis: Austria, siglo XVIII. Pueblos rodeados de profundos bosques. En lo alto de una colina, una mujer ha sido ejecutada y expuesta a la vista de todos tras matar a un bebé. Como prueba. Como advertencia. ¿Cómo un presagio? Agnes, profundamente religiosa y muy sensible, se casa con su amado Wolf y se prepara cándidamente para una vida de esposa. Poco después, su cabeza y su corazón empiezan a sentirse pesados. Día tras día, se ve cada vez más atrapada en un camino turbio y solitario que la conduce a malos pensamientos. Quizá, no sólo pensamientos.

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