15ª Muestra Syfy: Dia 3. How to talk at girls at parties y todo lo demás

En el tercer día de la muestra, sábado 10, empezamos con sueño porque estábamos ya allí como unos campeones viendo la matinal rodeados de niños, muchos berreando pero la mayoría disfrutando de una película familiar como Peter Rabbit, a las 16 llegamos con la cinta china animada y plomiza Have a nice Day y después nos dejamos engatusar en parte por otra vuelta de tuerca a las historias de infectados irlandesas en The cured y, sobre todo, por Salyut 7, que es una auténtica sorpresa aunque no deja de ser una rusada (es una cinta muy americana con todos los tópicos posibles de cintas sobre viajes espaciales, pero rodada con buen pulso narrativo y buena dirección). Pero lo de John Cameron Mitchell ya son palabras mayores,una cinta de culto

Peter Rabbit

Dirigida por Will Gluck (Annie, Rumores y mentiras) narra de una forma un tanto abrupta y atropellada las aventuras de un conejo que huye de un malvado dueño de un huerto. Adaptación de una de las preciosas historias y dibujos de Beatrix Potter  de un conejo rebelde que intenta colarse en la huerta de un granjero. La vida de esta escritora ya se llevó a la gran pantalla protagonizada por Renée Zellwegher (siempre exagerada) en Miss Potter. La cinta es amena, no se hace pesada pero sí es muy británica e infantil. No pasa a convertirse en una gran película para toda la familia, pero sí que es un entretenimiento entrañable y con mensaje menos edulcorado, pero también educativo.

Have a nice day

( Liu Jian, China, 2017). La única peli animada de las presentadas este año. Un dibujo tan simple, de trazo poco estilizado y de animación casi inexistente. Técnicas que, me cuentan, se pueden observar también en esa serie animada de excelente crítica de Netflix: Bojack Horseman, pero allí al servicio de un imponente guión tan creativo como profundo, que va desde el psicoanálisis a la comedia y al drama más rotundo y visceral. Aquí la historia no hay por donde cogerla. La peli ha tenido unas críticas estupendas y no lo entendemos porque o somos muy tontos o en sus larguísimos 75 minutos, no hemos entendido nada. Ni hemos seguido el hilo narrativo ni entendíamos que apareciesen personajes nuevos cada dos minutos; no nos ha gustado nada que en esa carente animación se animaran solamente fragmentos del dibujo: Caras, Ojos, muecas, neones. El resto… era meramente figurativo. Un horror.

The cured

(David Freyne, Irlanda, 2017). Protagonizada por Ellen Page, que también produce la cinta. Es una nueva reinterpretación de las películas de infectados con 28 días después como imbatible referente. Ellen Page es aquí una desaprovechada madre sufridora. LA cinta adolece de falta de ritmo en su parte inicial. Pero su peor defecto es su carácter de telenovela más preocupada en descubrir el conflicto familiar que en delimitar y transgredir los pormenores de este género. Buena factura y buen ritmo final.

Salyut 7

Hace nada hemos visto Hard as indie, el documental que recrea el horrible rodaje de aquella película amateur que se financió con crowfunding que se llamaba El cosmonauta. Y eso nos dejó con ganas de más. Sabíamos que la tendríamos en la muestra y ha sido toda una sorpresa porque lo cierto fue que no nos esperábamos nada. ¿Una peli rusa en el espacio? Plomiza seguro y no. Salyut es realista y sin estridencias pero cuenta con todos los tópicos de las películas sobre el espacio americanas. Parece un Apolo 13 hecho en Rusia. Hay épica, hay héroes, hay patriotismo pero también hay amor a la ciencia, humanidad e infinito amor por el espacio cósmico. Su leitmotiv es el espacio pero creo que su género es aventuras.

How to talk to girls at parties 

(John Cameron Mitchell, Usa, 2017)Se atreve con el punk, con el amor, con las drogas, con la adolescencia, con los aliénigenas, con los 70, con estética grunge, new age y con imágenes potentes visualmente. Colorida y una auténtica película de culto; el director de Hedwig and the angry inch y Rabbit hole (ambas obras maestras, porque es un genio), se adentra en un relato escrito por Neil Gaiman en la Inglaterra de los setenta. Es un canto de amor al punk «Makes me more punk» a través de la atípica pero preciosa historia de amor de dos adolescentes un tanto peculiares. Su ritmo fascinante, su estética, su historia tierna y polémica y sus formas, son exquisitas y elevan el nivel de la muestra a uno de los mejores que recordamos.

Victor Crowley 

 (2017, Adam Green). Cine cutre para la hora mandanguer, pero con un público predispuesto a  reirse a carcajadas con un slasher tan ridículo como divertido. Cuarta entrega de la saga de Hatchett que después de Scream y Se lo que hicistéis en los 90, ayudó a revitalizar el género. Abundante gore, casquería fina, personajes que ya habíamos visto en anteriores películas de la saga, pantanos y noche, donde pasa todo lo malo, algunas muertes absurdas y mucha scream queen repartida.Perfecta para la madrugada.

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